Vargas Llosa visitó República Dominicana en el año 1975 y quedó impresionado por el nivel de dominio que sobre las vidas de los naturales, mantenía la dictadura de Rafael Trujillo.
Decidió investigar sobre el tema y publicar el libro que narrara el final de esta penosa época centroamericana.
Rafael Leonidas Trujillo fue el dictador más sanguinario de latinoamérica. Bajo su yugo de más de 30 años en el poder dominó a la República Dominicana llevándola a extremos inimaginables de corrupción, y aniquilación de la sociedad.
Decidió investigar sobre el tema y publicar el libro que narrara el final de esta penosa época centroamericana.
Rafael Leonidas Trujillo fue el dictador más sanguinario de latinoamérica. Bajo su yugo de más de 30 años en el poder dominó a la República Dominicana llevándola a extremos inimaginables de corrupción, y aniquilación de la sociedad.
En el argot popular, se referían a él como El Chivo por los alardes de potencia viril que exhibía el dictador.
Uralia Cabral es una auto exiliada que regresa a su patria después de 35 años para visitar a su muy deteriorado padre, y en una cena de familiares confiesa el secreto guardado todo este tiempo y que motivó su fuga del país.
Uralia Cabral es una auto exiliada que regresa a su patria después de 35 años para visitar a su muy deteriorado padre, y en una cena de familiares confiesa el secreto guardado todo este tiempo y que motivó su fuga del país.
Su padre, hombre fuerte del régimen de Trujillo en ese entonces, había accedido entregar a su hija al dictador a cambio de mantenerse en el puesto confiado.
Esta confesión genera el desprestigio total de Agustín Cabral, padre de Uralia.
Antonio de la Maza y Antonio Imbert son 2 servidores del régimen que se unen para conjurar contra Trujillo y planear su asesinato. Ambos tienen fuertes motivos que encierran venganza y desazón por el asesinato de familiares cercanos a ellos y que se oponían al régimen.
El plan se organiza con otros colaboradores y se establece un punto de carretera para la ejecución. Esta se produce, pero en el hecho fallecen además de Trujillo, algunos de los colaboradores de los conjurados.
Es el fin del régimen, sin no varias represalias sangrientas, se inicia la democratización del sufrido pueblo dominicano. Algunos de los protagonistas vivieron hasta el inicio de este siglo.
Vargas Llosa plantea estas 3 historias en simultáneo, con lo que nos da a los lectores un panorama amplio de la situación que se vivía en ese país.
Los exiliados que veían desde fuera el deterioro de su país, el dictador que continuaba gobernando con todos los excesos incontrolables que su permanencia de 31 años!! en el poder le concedía, y la concertación para poner término al régimen, pero no como el resultado de un movimiento revolucionario, sino sustentado en la venganza de algunos afectados directamente.
Esta confesión genera el desprestigio total de Agustín Cabral, padre de Uralia.
Antonio de la Maza y Antonio Imbert son 2 servidores del régimen que se unen para conjurar contra Trujillo y planear su asesinato. Ambos tienen fuertes motivos que encierran venganza y desazón por el asesinato de familiares cercanos a ellos y que se oponían al régimen.
El plan se organiza con otros colaboradores y se establece un punto de carretera para la ejecución. Esta se produce, pero en el hecho fallecen además de Trujillo, algunos de los colaboradores de los conjurados.
Es el fin del régimen, sin no varias represalias sangrientas, se inicia la democratización del sufrido pueblo dominicano. Algunos de los protagonistas vivieron hasta el inicio de este siglo.
Vargas Llosa plantea estas 3 historias en simultáneo, con lo que nos da a los lectores un panorama amplio de la situación que se vivía en ese país.
Los exiliados que veían desde fuera el deterioro de su país, el dictador que continuaba gobernando con todos los excesos incontrolables que su permanencia de 31 años!! en el poder le concedía, y la concertación para poner término al régimen, pero no como el resultado de un movimiento revolucionario, sino sustentado en la venganza de algunos afectados directamente.
Hay un error garrafal: Vargas Llosa no pudo haber conocido la República Dominicana bajo Trujillo en 1975, porque el dictador fue asesinado el 30 de mayo de 1961. Es decir, hay catorce años de distancia entre la fecha de la visita del futuro Nobel y la muerte del sátrapa. Para ese tiempo, principios de los sesenta, Vargas Llosa apenas empezaba su carrera como novelista, terminaba sus estudios literarios en la Universidad de San Marcos de Lima, y se disponía a partir para Europa, concretamente, a París, donde residiría antes de vivir en Barcelona y Londres. De haber hecho Vargas Llosa un viaje a la República Dominicana por la época de Trujillo, esto sería uno de los principales datos históricos de su biografía, pero, extrañamente, no se menciona en ninguna de ellas. Saludos desde Bogotá, Colombia.
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